Recientemente se está vendiendo en Europa una bolsa biodegradable con una presentación idéntica a las bolsas de plástico o polímeros, sin embargo, esta hecha de papa (Solanum sp). Se trata de una ecobolsa que no se desintegra sino que se degrada, condición en la que se convierte en parte del sustrato y puede incluso aportar nutrientes al suelo. Presenta diversas propiedades y su uso en países como Francia han hecho que la generación de desechos plásticos sea un menor problema para la biodiversidad y ecosistemas presentes. Para mayor información puede consultar el siguiente vínculo.
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